Κυριακή 27 Ιουνίου 2010

ANÁLISIS ACTANCIAL DEL TEXTO DRAMÁTICO ¿ÚLTIMO ROUND? DE EDGAR CHÍAS



IV: JAIME Y PERLA



PERLA

Tomando a Perla como sujeto para el análisis del texto, por un lado su objeto se mueve en torno al deseo de convencer a Jaime de que se quede con ella y de que este último acepte la paternidad que le corresponde, es decir, su deseo se vierte sobre tres intereses entrelazados: primero tener al hijo y que Jaime lo acepte, y a la vez permanecer juntos. Así, la motivación de Perla en ese sentido es el convencimiento que ella trata de ocasionar en Jaime, la persuasión en favor de su interés más esencial: tener a su hijo. Pero a la vez otro elemento de deseo presente en Perla es que Jaime se de cuenta de lo que ella siente por él, ya que al parecer ella realmente lo aprecia, quizá hasta lo ama de verdad y su relación con Fernando es meramente de amistad y apoyo. El texo no es plenamente explícito en cuanto a los verdaderos sentimientos de Perla por Jaime o por Fernando, a momentos resulta que ella siente algo más por Fernando, son como indicios, y que además sólo quiere a Jaime para que responda a la responsabilidad del bebe que viene camino.

En cuanto al Destinador (dador), la pregunta es: ¿Quién puede darle a Perla lo que desea? De primera mano quizá la respuesta más lógica sería Jaime, él es su donador de felicidad o satisfactor más evidente. Pero por otra parte, lo que busca Perla lo puede encontrar con Jaime o no, esencialmente lo que ella quiere realmente es tener al bebe, sea o no que Jaime lo acepte. Por el lado del Destinatario (receptor) el bien es para Perla, pero también para el hijo que ella espera, porque obtendrá el bien, el don, de la vida. El derecho a elegir sobre la vida de su hijo, y la responsabilidad de una vida recaen en Perla ya que dependiendo de la decesión que tome penderá a su vez la vida del bebe.

Para analizar las fuerzas a favor de los intereses de Perla, o la potencia Ayudante el texto ofrece la idea de que Fernando es una especie de héroe y de que Jaime es el villano, en un sentido podría ser así, pero lo cierto es que tal situación suele ocurrir en la realidad, guarda un rasgo de verosimilitud pero también mucho de realidad. La trama de la historia es un hecho, o sea, una situación común en la realidad, verosímil, plausible y real. Así que ninguno de los personajes es totalmente bueno o malo, responden a estímulos conforme a sus movimientos internos, motivaciones personales, deseos próximos y lejanos, anhelos y necesidades, como ocurre mayormente en la vida. El oponente de Perla podría ser Jaime como sujeto, o también alguna situación en particular. El oponente principal de ella a lo mejor es el cúmulo de situaciones que le impiden dar a luz al niño que espera, y en particular las decisiones que tome Jaime con respecto a tal cuestión.




JAIME

En el caso de analizar el texto desde Jaime como sujeto su objeto básico resulta ser: por una parte retener a Perla, que ella acepte abortar, pero esencialmente el objeto de deseo de Jaime es deslindarse de toda responsabilidad que lo vincule con la paternidad del hijo que espera Perla. Jaime evidentemente tiene sentimientos de afecto por la mujer, muestra indicios de sentir algo fuerte por ella, pero más que amarla su deseo es de retención, de capricho, de empecinamiento.

Para generarse una visón del Destinador (dador) en la obra, se pueden tomar las decisiones que lleve a cabo Perla, que acepte abortar o que renuncie a todo tipo de relación con Jaime como elementos primordiales que dan vida a la idea de destinador para Jaime. El Destinatario (receptor) en este caso, es el que obtiene la ganancia de tal deseo, es decir, el propio Jaime. Lo anterior porque si Perla decide abortar entonces el deseo de Jaime se cumple, pero si ella abandona a Jaime también se cumple de deseo de este último, dado que le interesa más a él no hacerse cargo del niño que permanecer junto a Perla.

El Ayudante de Jaime es Fernando, aunque parezca paradójico decirlo, pero puede colaborar, de hecho lo hace así, para la obtención del deseo de Jaime: no tener al niño o desvincularse de toda responsabilidad. Una motivación fuerte para que Perla abandone a Jaime es Fernando, por eso un ayudante fuerte para que Jaime logre su objetivo indirectamente es la figura de Fernando. El oponente directo a los deseos de Jaime es el que Perla acepte tener al hijo, las decisiones de Perla son las contradicciones externas a la voluntad de Jaime, a sus deseos más evidentes, los que motivan el sentido de sus acciones y decisiones.

REFLEXIÓN ACERCA DEL ESTUDIO TEATRAL Y SUS EFECTOS EN EL INDIVIDUO



REFLEXIÓN ACERCA DEL ESTUDIO TEATRAL Y SUS EFECTOS EN EL INDIVIDUO


El mundo es un escenario, y todos los hombres
y mujeres son meros actores”

Shakespeare, William



La vida del ser humano se puede comprender con seguridad en ciclos, y es que todo cuanto sorprende al entendimiento se muestra de forma cíclica. El tiempo mismo, como han detallado con acierto las culturas maestras de antaño es un conjunto de ciclos, es arte temporal, es un flujo de instantes interrelacionados que se conjuntan y se asimilan desde la conciencia. Así, se puede ver que cada cosa que hagamos está circunscrita de forma natural a pequeños objetivos concientes o inconcientes, lo que deriva en un gran objetivo, el cual, forma parte de ese algo más. Así, hasta llegar a una cosmovisión, o a una significación de la vida misma. Al cerrar un pequeño ciclo, se cual sea su naturaleza, se observa, el comienzo de otro camino que exige nuevas formas de entendimiento, y un carácter endeble, como la rama en un punto medio, que ni esta tan dura, ni tan suave, se necesita una voluntad flexible empapada de sentido común. Queda dicho de esta forma, que lo más exacto en cuanto a nuestra disposición natural es la parte propicia al cambio, a conciencia, dispuesto a desarrollar facultades propias del hombre, pues el hombre es un cúmulo de potencialidades. “Sólo se que nada se”, desde esa sentencia partir hacia el conocimiento. La vida es un movimiento natural donde la dualidad nacimiento- muerte se da de forma irrevocable, y esto se muestra en todo, evidentemente también en el arte. Renacer en todo, sobre cualquier aspecto, más en la conciencia, continuamente, un aquí y ahora.

La antigua sabiduría egipcia recalcaba sin titubeos que todo es mental. Poco importa el factor exterior, lo importante es la visualización. Si, la vida se ve desde una significación personal y es que "no son las cosas las que nos afectan sino el sentido que les damos" dice con acierto un adagio popular. La reflexión sobre el arte, es muy personal, porque desde allí parten los supuestos y los axiomas, que definen el carácter de la estética y las convenciones, los consensos, es una suma de individualidades. El teatro es manifestación de la idea, es realización y complementariedad, además de tener una fuerte carga totalizante. El teatro es una muerte que nos lleva a un renacer. Ligado a ello, con ese renacer totalizante aparece la reflexión. De tal manera que la filosofía es en esencia una actitud hacia la vida y algo natural en el hombre. Parece que las profesiones son elecciones que van acorde a capacidades y aptitudes. Lo cierto es que el hombre es un mar de potencialidades esperando ser puestas en práctica, eso es una de las cosas que más apasiona del desarrollo teatral a nivel individual. El hombre ciertamente es creador, un ser que da. Aunado a esto el arte es práctica expresa de esa idea. El teatro por su sentido multidisciplinarlo es muy interesante y pedagógico, lúdico, curativo, humaniza y funge igualmente como un vehiculo maravilloso para la trasmisión de ideas, para la comprensión del mundo, y para mostrar significados, sistemas de simbolización y formas culturales, que van desde lo primario hasta llegar a elevar al hombre a un entendimiento tal de sí mismo, que éste, modifique su vida o bien que trasforme su carácter y se encuentre también mediante éste ejercicio trascendental a sí mismo, como un ser de posibilidad, volitivo y preparado para vivir con una conciencia ligada a la acción, al actuar conciente.

Por ello, el estudio del teatro lleva a experimentar varias cosas, desde lo conceptual hasta lo meramente vivencial, pasar de un enriquecimiento cultural, hasta una sensibilización y una modificación de un andar por el mundo. “De poco a poco se hace mucho” decía Cicerón. Sólo el hombre desde su conciencia puede comprender su mundo y su sentido en él. Ahora bien, lo que enriquece en demasía es esa relación con el otro, con el ser humando que brinda la otredad, aquella categoría que se da expresamente en el teatro, esta sociabilización a nivel bien humano y sincera, es un hecho social neto. Las formas de representación que son naturales en el hombre. El teatro puede ser entendido a ciencia cierta como un acto ritual, como algo sacro, un encuentro cósmico, un modo de mover la energía y crear un momento, un instante de magia como bien dicen los autores reconocidos en esta área, parafraseando varias ideas: hacer visible lo invisible en un momento presente y en un espacio vacío, desde toda nuestra concentración y con un movimiento orgánico desde el interior, hasta la expresión del cuerpo, con todas las dinámicas que se presentan en cada cultura, un equilibrio natural , una lucha de dualidades, un punto estático, un impacto de golpe, una respuesta, y una generación de estímulo respectivamente, todo esto y además un sentir interno, una remembranza, haciéndola real y representando un hecho determinado. Así el teatro es muerte y vida, pero ante todo es una necesidad humana, es un goce, un compromiso, una complementariedad y una forma de vida.

GRACIAS A LA VIDA



Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros que, cuando los abro,
Perfecto distingo lo negro del blanco,
Y en el alto cielo su fondo estrellado
Y en las multitudes el hombre que yo amo.


Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
Graba noche y día grillos y canarios;
Martillos, turbinas, ladridos, chubascos,
Y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido y el abecedario,
Con él las palabras que pienso y declaro:
Madre, amigo, hermano, y luz alumbrando
La ruta del alma del que estoy amando.


Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
Con ellos anduve ciudades y charcos,
Playas y desiertos, montañas y llanos,
Y la casa tuya, tu calle y tu patio.


Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio el corazón que agita su marco
Cuando miro el fruto del cerebro humano;
Cuando miro el bueno tan lejos del malo,
Cuando miro el fondo de tus ojos claros.


Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
Los dos materiales que forman mi canto,
Y el canto de ustedes que es el mismo canto
Y el canto de todos, que es mi propio canto.


Gracias a la vida que me ha dado tanto.



VIOLETA PARRA